Conocido como Shangri La y también como el Reino Prohibido por su aislamiento geográfico y político, Bhután cuesta encontrarlo en el mapa, entre dos poderosos como son India y China. Separado del Tíbet por el Himalaya, su pasado y sus gentes se hayan conectados con él. Mejor comunicado con India, no ha permitido su influencia.
Bhután es un país lleno de montañas nevadas, glaciares, lagos cristalinos, ríos caudalosos, verdes campos en terrazas y valles llenos de flores. El norte está dominado por las altas cumbres de la cordillera del Himalaya. La región central la forman valles templados y en el sur domina la selva tropical.
Su nombre deriva de la palabra “Bhotana”, nombre de origen indú con el que antiguamente se nombraba a las regiones habitadas por gente de raza tibetana. Aislado durante años, los primeros turistas llegaron en 1947 mientas que la televisión y los teléfonos se hicieron presentes recién en 1999. Todo esto ha llevado a mantener su cultura y forma de vida con una idiosincrasia muy particular, un pueblo único que mide la riqueza en función de la felicidad de las personas. Su reciente apertura al exterior no deja de ser un reto para futuras generaciones, lo que invita a conocerlo sin demora.